Se podría decir que para los lectores intensos (un libro tras otro) la llegada del Kindle marca un antes y un después en sus vidas. No es lo mismo llevar a la playa el amado libro gordo, flaco o amarillento a llevar este delgado aparatito que te permite almacenar y comprar cuántos libros electrónicos se te ocurra conseguir. El wireless a través del que es posible subirse a la “nube” de contenidos permite rastrear lo inimaginable, y lo más importante, descargarlo a tu dispositivo. Sólo necesitas tiempo y mucha paciencia para darte una vuelta por blogs y páginas web que ofrecen descargas gratis de libros en formato pdf con excelente calidad y que vienen completitos, o también puedes comprar los bestsellers del momento en sitios como Amazon o Ebay.
Por cierto, aquí comparto el link de un sitio donde se pueden descargar pdfs sobre Social Media, Comunicación y Web 2.0.
Retomando. Debo confesar que me he enganchado a la moda del Kindle sin pensarlo y sin cansarme a lo largo y ancho de agosto. Las herramientas que he descubierto se las contaré en un próximo post porque en esta entrada inaugural prefiero enseñarles mis dotes con la aguja y el hilo. Vamos en orden. Una vez que la tecnología llega a nuestras manos, acariciamos un mundo de posibilidades. Por ello, debemos cuidar con esmero aquello que traducido en dólares y euros representa una verdadera inversión digamos en educación, por no decir entretenimiento ininterrumpido. En mi caso, ni siquiera me había planteado sacar el Kindle de mi casa -tomé esta decisión basada en el cuidado porque hay tantas cosas en un bolso de mujer que bien podría rayarse-, hasta que vi a una modelo posando sentada en la playa en uno de los anuncios del producto.
Me puse en la tarea de buscar un estuche con estilo, obviamente femenino con un toque “diferente”. En seguida la desilusión por los precios. Pero el deseo por probar la lectura al pie del mar intacto. Así que conseguí una funda de neopreno en una tienda cercana, la dividí en dos partes, miré las opciones de diseño (colores, formas y apliques que me daban juego) y aquí están los resultados.
Hasta aquí La lleva Alicia... ¡paso la idea a quien le sirva! Espero sus comentarios...y bienvenidos.
